martes, 10 de octubre de 2023

BALBINO PÉREZ CEJUELA ARTISTA COMPLETO

 Editor: Pedro Taracena Gil 



Anónimo


Anónimo

La palabra teriantrópico es un adjetivo documentado en latín científico (therianthropic) hacia 1885-1890 que designa a 'lo que es parcialmente bestia (therión) y parcialmente humano (ánthropos) en su forma o aspecto'; también 'lo relacionado con deidades o dioses concebidos o representados en tales formas'.

 ¿Qué es la teriantropía?

POR SERGIO CUEVAS

PUBLICADO 25 MAY 2015 – 04:00 PM EDT | ACTUALIZADO 24 ABR 2018 – 02:37 PM EDT

 En la cultura popular, cuando pensamos en un hombre que se transforma en bestia por lo general pensamos inmediatamente en el hombre lobo, pero no es el único animal en que puede transformarse según el mito. La teriantropía habla sobre la habilidad del hombre de convertirse en un animal, así como también de las manifestaciones que hay de estos seres en la mitología y el folclor.

Alrededor del mundo hay historias de todo tipo de teriantropos, desde los hombres perro de China, hasta los hombres leopardo de África. En el arte egipcio se manifiesta en la forma de los dioses que tienen cuerpo de hombre y cabeza de animal. A ellos se les llama teriancéfalos. Pero no solo los hay en la mitología egipcia, los hay también en la griega con las harpías, las sirenas, los centauros, los sátiros y el minotauro.

A diferencia de los egipcios, estos representaban no solo lo divino, sino el punto intermedio entre esto y lo terrenal, ya que los dioses tenían forma humana, pero algunos de sus vástagos no. También el mito original de la licantropía proviene de la mitología griega, pues el rey Licaón fue castigado por Zeus y transformado en lobo.

 NOTAS CONSUTADAS

 https://weekend.perfil.com/noticias/informativo/por-que-los-gatos-eran-sagrados-para-los-egipcios.phtml

 COMENTARIOS SOBRE LA OBRA DE BALBINO PÉREZ

 Pedro Taracena Gil

Periodista

 Navegando por la obra de este singular artista, en principio nos obliga a despojarnos de toda valoración moral y de cualquier prejuicio sexual o erótico. Si hacemos una primera lectura plástica con libertad, si somo sinceros con nosotros mismos, habremos descubierto que la sexualidad en libertad se confunde con el misticismo y el orgasmo con el éxtasis. Si esta contemplación busca la verdad habremos descubierto la base de nuestro comportamiento natural, más aún nuestra esencia animal. No es que el hombre y la mujer se comporten con la libertad de los animales, sino que nos comportamos como animales. Cuanto más salvajes más auténticos y verdaderos. Los animales están en celo, como los seres humanos, las hembras son echadas al macho como los hombres y las mujeres. Con una gran diferencia que los animales se parean por instinto y de ahí la procreación para que se perpetúe la especie. Los animales están sujetos a un plan natural, manipulando el hombre las ocasiones de cuando el macho encaloma o monta a la hembra.

La Energía Sexual rige el mundo, pero queda domesticada por el hecho religioso. La clase sacerdotal de las regiones han domesticado el instinto y el deseo sexual castrando al hombre y la mujer, condenándoles a la enajenación sexual. Sin duda estas diez imágenes de este insigne artista, representan las formas de la Energía en reposo, que nuestro cuerpo posee convertible en sensaciones, emociones y sentimientos, es decir, la Energía en movimiento. Basta con estimular al cuerpo humano para que Eros provoque el deseo sexual capaz de sacar el animal erótico que todos y todas llevamos dentro. La Serpiente y el Falo mantienen un pareado erótico y mítico al mismo tiempo. Rompiendo el esquema divino del Génesis. Tanto la serpiente como el falo no son enemigos, se convierten en personajes alegóricos donde no existe el género masculino y femenino, hombre y mujer, sino más bien seres humanos que son capaces de crear energía sexual al margen de la perpetuación de su especie.

Confieso que me he tomado la licencia de hacer una abstracción de la figura del gato en la obra de Balbino Pérez. Según este ensayo:

 “Además, se pensaba que ayudaba a la fecundidad tanto de los hombres como de los animales, que curaba todo tipo de enfermedades y que velaba por las almas de todos los muertos.

Por aquellos tiempos, el gato no podía ser propiedad de ninguna persona, a excepción de los faraones, quienes eran los únicos que tenían el derecho de tener y domesticar a esa criatura sagrada. También existía una dura ley que prohibía tanto la venta, como el maltrato o el asesinato de los gatos: el que mataba a un felino corría su misma suerte.

Si bien es cierto que los faraones también consideraban sagrados a otros animales, como por ejemplo los peces, las serpientes y las vacas, lo cierto es que el gato era el más sagrado de todos.

Aunque, según la historia, la domesticación de los gatos comenzó en el año 2.000 a.C., cuando se convirtió en un animal de compañía apreciado por su dulzura, su encanto, su misterioso comportamiento, y sobre todo, por ser protector del hogar, el hallazgo, en 2004, de los restos de un gato al lado de un humano en una tumba en Chipre remite el comienzo de esa relación al año 7.500 A.C.”

Retomando este breve y atrevido pareado erótico no seré yo quien formula la más mínima crítica a la composición de figuras que por voluntad del artista, narran la sexualidad de animales míticos portadores del instinto, pero semejantes a los animales portadores de la razón y el deseo”. 

GALERÍA DE IMÁGENES











COMENTARIO: Pedro Taracena Gil

Periodista


1 comentario:

  1. Gracias Pedro por ésta estupenda investigación, sobre la teriantropia. Es una palabra que descubrí y me encajaba para una nueva propuesta artística. Claro yo hago cómo siempre mí propia interpretación.

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